miércoles, 19 de noviembre de 2008

Mensaje encontrado en una botella, de Rodolfo Serrano

Si algún día naufragara en una isla perdida, tengo la absoluta certeza de que pensaría lo mismo que escribió Rodolfo Serrano en su poema "Mensaje encontrado en una botella".
Hace ya siete meses, tres días y dos horas
naufragué en esta isla que no está en ningún mapa.
La primera semana lloré como un muchacho
asustado y el miedo vino a vivir conmigo.

Luego maldije a Dios los quince días siguientes.
Y me pasé tres días sin agua ni comida.
Los siguientes dos meses he añorado tu cuer
po
y soñado con el tibio roce de las sábanas.

Cada noche encendía hogueras en los mon
tes
pendiente de que un barco pasara por delante
de esta isla maldita. Y en la playa he dejado
mensajes d
e socorro pidiendo que vinieras.

Arrojé cien botellas con mensajes urgentes.
Y durante tres meses aprendí que la vida
es un cangrejo, un fruto, el agua del torrente,
el sol que cada tarde pinta de rojo el agua.

Ya no siento temores. Recuerdo vagamen
te
que más allá del mar hay fusiles y espadas
y hombres que maldicen haber nacido un día.
Y que aquel mundo era una isla de monstruos.

Ayer me despe
rté cantando sin que nadie
me dijera: “Estás loco ¿A qué tanta alegría?”
Y cada tarde escribo en la arena unos versos
que borran las mareas y que de nuevo escribo.

Hoy he visto pasar un barco no muy lejos.
He apagado raudo la luz de las hogueras
y he borrado todos los mensajes de auxilio.
Afortunadamente el buque ha pasado de l
argo.



1 comentario:

Anónimo dijo...

Un post vital donde los haya, ¿quiénes son los que realmente naufragamos cada día en esta sociedad de las prisas y de las guerras? Normal que apagara todos los fuegos. Saludos desde La Condena de Sísifo, enlazo tu blog porque disfruto leyendolo